Tras el resultado de las elecciones generales del 20D y la
actual situación post-electoral la directiva de Telecirco ha decidido crear un
programa para aclarar cuál será el futuro dueño de Gran Moncloa VIP. En dicho
formato están participando los candidatos de los partidos políticos que se
presentaron a dichas elecciones.
El primero de los favoritos en salir ha sido Mariano Rajoy,
que ha durado menos en la casa que el Madrid la Copa del Rey. Mariano ha
abandonado la casa tras darse cuenta que nadie le hacía caso y desayunaba en
una mesa aparte con el MARCA que tanto le gusta leer cada día. Aún así, tiene
la posibilidad de volver y directamente apropiarse de la mansión. Antes de
dejar la casa ha dejado un mensaje a sus votantes: “Muchas tardes y buenas
gracias a los muy españoles y mucho españoles”.
Todo depende de Pdr Snchz, al que le han tendido una trampa.
Ha entrado en la casa con su hermana Susana Díaz, sus padres y su marido Pablo
Iglesias. Pdr tiene todo en su mano para poder gobernar la vivienda, pero su
familia no acepta el matrimonio, alegando de Iglesias que deje los pelos en la
bañera, sus continuas quejas de si echarle al café azúcar o sacarina o su
empeño en querer aprender a hablar catalán. Lo que propone su familia es
abstenerse para que gobierne Rajoy, ya que Pdr sabe que un gobierno con Pablo
Iglesias significa su expulsión de la familia pues consideran que su matrimonio
con Iglesias significa la ruina familiar.
Aún así, Pablo está celoso de Albert Rivera, y los celos
entre los dos son mutuos. Aunque los dos aparentemente se lleven bien la
realidad es totalmente diferente. Si Pdr se queda con uno, el otro no quiere
quedarse. Pablo piensa al igual que gran parte de la audiencia que Albert
Rivera es el hijo de Mariano Rajoy Vader, y que viene desde el lado oscuro de
Génova, mientras que Rivera ve a Pablo Iglesias como un Satanás que quiere romper
la tranquilidad de la casa y buscar la independencia de su habitación.
Ha pasado casi mes y medio desde que empezó el concurso y
seguimos sin un ganador. Y por lo contado ya, no parece que vaya a haber un
ganador dentro de poco. Quizás la clave sería que todos los contendientes de la
casa dejaran de hablar tanto y empezaran a escucharse unos a otros. Ahí quizás
esté la clave. Pero esto será en el siguiente programa de Gran Moncloa VIP.
No hay comentarios:
Publicar un comentario